DEVOCIONAL PARA MATRIMONIOS
DIA 5
MOMENTO EN QUE COMIENZA LA VIDA
Si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado lo nuevo!
2 Corintios 5: 17
Si usted y su cónyuge quieren realmente experimentar el amor verdadero, la clase que dura a través de la eternidad, deben enfrentar la verdad en cuanto a su posición ante Dios. De acuerdo con la Biblia, todos hemos nacido con una naturaleza pecaminosa (Romanos 3:23). Este problema del pecado nos impide vivir de acuerdo con las normas de Dios, tanto como individuos o como pareja casada. De hecho, el pecado no resuelto bloqueará aun nuestros mejores esfuerzos para tener un matrimonio exitoso, porque el resultado inevitable del pecado es la esclavitud a nuestros peores impul-sos y, finalmente, la muerte (Romanos 6:23).
¡Pero hay una alternativa maravillosa! Jesucristo pagó el precio por su pecado por medio de su muerte en la cruz. Y por su resurrección milagrosa, lo rescató de la destrucción eterna. Usted puede ir a él en fe y recibir el don gratuito de la nueva vida. Jesús expresa las buenas nuevas de esta forma: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su único Hijo, para que todo el que cree en él no perezca, sino que tenga vida eterna" (Juan 3:16).
Es así de sencillo: Si usted escoge arrepentirse de sus pecados y recibir el don de la salvación por medio de la fe en Jesucristo, será perdonado y recibirá Su don de la vida eterna.
Si usted no conoce a Jesucristo de esta forma íntima, le invitamos a que haga la siguiente oración esta noche. Para cada ser humano que invita a Jesús a que entre en su corazón, ¡ése es el momento en que comienza la vida verdadera!
Sólo entre nosotros
¿Hemos decidido cada uno de nosotros recibir el don de Dios de la salvación?
¿Si no es así, ¿qué es lo que nos impide hacer esa elección?
Oremos: Dios, soy un pecador que te necesita. No puedo vivir como debo vivir o tener esperanza de vida eterna por mis propios medios. Por favor, perdona mis pecados. Creo que Jesucristo es tu único Hijo. Tú lo mandaste para que muriera en mi lugar, y me liberara de mi pecado. ¡Gracias! Amén.
DEVOCIONAL PARA MATRIMONIOS
DIA 4
LA TERCERA PERSONA
Porque nadie puede poner un fundamento diferente del que ya está puesto, que es Jesucristo.
1 Corintios 3: 11
Para experimentar el amor verdadero con nuestro cónyuge, debemos traer a una tercera persona dentro de la ecuación, a Jesucristo. Solamente a través de esta conexión espiritual con él podemos comenzar a cumplir todo el potencial de la relación que llamamos matrimonio.
Los que estudian la Biblia reconocerán muchos principios entretejidos entre sus páginas que se aplican a la vida matrimonial. Los valores judeocristianos han guiado con eficacia a los hombres y a las mujeres desde el principio. Estos valores fueron inspirados por el Creador mismo, el originador de la institución del matrimonio. No importa lo que diga la sociedad, o cómo cambien las leyes, los preceptos que constituyen este sistema bíblico sigue siendo el camino para encontrar amor y felicidad en la vida.
El establecer una relación personal con Jesucristo es el primer paso crítico hacia obtener todas las metas significativas, incluyendo la intimidad que todos buscamos. Si usted todavía no le ha entregado su corazón a Jesús, lo instamos a que lo haga. Traerá significado y propósito a todas las esferas de su vida, incluyendo su matrimonio. Mañana le explicaremos cómo.
Sólo entre nosotros
¿Cómo hemos puesto a funcionar los principios bíblicos en nuestro matrimonio?
¿Cómo puedo animarte a pasar más tiempo en la Palabra de Dios?
¿Hemos invitado los dos personalmente a Jesucristo a que sea Señor de nuestras vidas y de nuestro matrimonio? Si no lo hemos hecho,
¿podemos ahora mismo tomar ese paso que cambiará nuestras vidas?
Oremos: Señor Jesús, tú eres el fundamento de nuestro matrimonio. Ayúdanos a mirarte a ti y a tu fuerza en todos los aspectos, a medida que construimos nuestra vida juntos. Amén.
DEVOCIONAL PARA MATRIMONIOS
DIA 3
Felices para siempre
¿Estás casado? No procures divorciarte 1era Corintios 7:27
Lo que usted ha observado en sus círculos sociales está confirmado por números: De acuerdo con casi todas las estadísticas confiables, la institución del matrimonio está en serio problema. El concilio sobre las familias en Estados Unidos informa que la mitad de los matrimonios entre personas que se casan por primera vez es probable que terminen en divorcio.
El centro nacional de estadísticas sobre la salud informa que el número de personas en los Estados Unidos escogen casarse está declinando. Y Brent Barlow, profesor de ciencias familiares en la Universidad de Brigham Young, dice que si las tendencias a vivir juntos sin casarse y al divorcio continúan, el estado “casado” podría llegar a ser una minoría dentro de pocos años.
Es obvio que millones de parejas que una vez estuvieron enamoradas profundamente y creían que estaban maravillosamente hechos el uno para el otro están viendo que sus matrimonios se desmoronan. Si usted y su cónyuge van a vencer el cálculo de probabilidades, tendrán que invertir dedicación y trabajo arduo en su relación.
¿Parece este desafío más una amenaza de una promesa? Tenemos buenas noticias. En primer lugar, las parejas que están dispuestas a invertir en su relación encontrarán y la satisfacción y el significado más grande que les puede ofrecer la vida. Esa es la promesa para un matrimonio dedicado a Dios. Y las estadísticas también confirman este hecho. En segundo lugar, usted no necesita tratar de vencer el cálculo de las probabilidades sólo. De hecho se supone que no tiene que ser así. Pero mañana hablaremos más de esto.
Sólo entre nosotros
En forma específica, ¿qué significa para ti tener un “matrimonio feliz”?
¿Eres feliz? ¿Por qué sí o por qué no?
¿Qué puedo hacer para traer más felicidad a tu vida?
Oremos: Padre celestial tú diseñaste el pacto del matrimonio desde el principio, y nuestro matrimonio te pertenece a ti. Bendice esta unión con tus mejores dones. Acércanos el uno al otro y acércanos a ti. En el nombre de Jesús. Amén.
DEVOCIONAL PARA MATRIMONIOS
DIA 2
“Luego tú viniste”
El amor jamás se extingue 1era Corintios 13:8
El joven esposo estaba desesperado. Hacía semanas que su esposa lo había abandonado a él y a sus dos hijos. Aunque ella lo llamaba de vez en cuando, él no tenía idea de su paradero. Él le decía por teléfono cuánto la amaba y cuánto la amaba a sus hijos, y le rogaba que regresara al hogar. Sin embargo, ella continuamente lo rechazaba.
¿Sería tiempo de darse por vencido y continuar con su vida?.
No, el esposo puso sus escasos ahorros y contrató a un detective, quién encontró a su esposa viviendo en un hotel de baja categoría al otro lado del país.
El esposo pidió prestado el dinero para comprar un pasaje de avión, y muy pronto estuvo a las puertas de ella diciéndole: “Te amamos mucho. Por favor regresa al hogar”. Ella se desmoronó en los brazos de él, y juntos regresaron al hogar.
Semanas más tarde Él le preguntó por qué no había regresado cuando él le había expresado su amor una y otra vez por teléfono. Ella le respondió: “Porque esas eran sólo palabras. Pero luego tú viniste” El amor verdadero es más que palabras. Tal vez involucre volar a través del país, aún cuando le cueste hasta su último centavo, para traer a su esposa de regreso al hogar.
Sólo entre nosotros
¿Cómo te he mostrado mi amor esta semana?
Si “las acciones hablan más alto que las palabras”, ¿están mis acciones hablando a voz en cuello o susurrándote mi amor por ti?
¿Qué puedo hacer esta semana para mostrar mi amor por ti?
¿Cómo específicamente, nos mostró Jesús su amor?
Oremos: amado Señor Jesús, queremos que tanto nuestras palabras como nuestras acciones expresen “amor” de maneras personales, poderosas y positivas. Muéstranos nuestra
DEVOCIONAL PARA MATRIMONIOS
DIA 1
Amor a primera vista El amor viene de Dios
1Juan 4:7
Algunas personas creen que el amor verdadero puede ocurrir en el momento en que un hombre y una mujer se miran. Pero “el amor a primera vista” es una imposibilidad física y emocional porque usted no puede amar a alguien a quien no conoce. Usted simplemente se siente atraído a la envoltura en que vive la persona. Un vínculo emocional que dura toda la vida es mucho más que un sentimiento romántico. Es más que una atracción sexual o la emoción de la conquista o el deseo de casarse. Tales sentimientos por lo general indican un simple capricho y tienden a ser temporales, y más bien de naturaleza egoísta. Una persona puede decir: “No puedo creer lo que me está pasando. ¡Es lo más fantástico que he experimentado en la vida!. Debo estar enamorado”. Fíjese que los que pronuncian estas declaraciones no están hablando de la otra persona, están entusiasmados con su propia satisfacción. Tales personas no se han enamorado de alguien, se han enamorado del amor. El amor verdadero no es algo en lo que una persona “cae” de pronto, como si tropezara y cayera en un pozo. Una persona no puede amar algo que no conoce, sin importar lo hermoso o buen mozo que pueda ser. Solamente cuando alguien comienza a desarrollar una apreciación y admiración profunda por otra persona, y toma conciencia de las necesidades de él o ella, de su carácter y solidez, es que puede comenzar a experimentar el amor verdadero. Desde allí, el amor debería crecer y durar toda la vida.
Sólo entre nosotros
¿Recuerdas cuando eras adolescente y pensabas que estabas enamorado, y ese sentimiento simplemente se desvaneció con el tiempo?
¿Qué pensaste y sentiste cuando conociste a tu cónyuge?
¿Como te mostró Dios que yo debía ser tu cónyuge?
Oremos: Amado Padre celestial, gracias por el maravilloso don del amor. Concédenos tu bendición, más de lo que podamos imaginar ahora mismo, en el nombre de Jesús. Amén
5 LADOS DE LA INTIMIDAD
[Revista Nro.124 Por María Ester Roblero C.
Los meses previos a un matrimonio son una verdadera gymkhana. Es probable que los recién casados comprueben que la primera tarea conyugal consiste en recuperar y reconstruir su intimidad, invadida por mil acontecimientos. Pero para ello deben saber que intimidad es mucho más que sexualidad
“Las cosas se complican cuando la ternura se limita a los momentos de pasión”, dice una canción. Una complicación que tiende a pasarle la cuenta en primer lugar a la mujer. Y es que ella posee un verdadero sexto sentido para declararse en alerta roja cuando algo, aunque no lo identifique claramente, está fallando en la relación. La falla, en este caso, consiste en que la auténtica intimidad no es sinónimo de sexualidad. Esta es sólo una de sus facetas, importante, indispensable, pero po-niéndolo en cifras: el 20%. Es decir, sólo uno de los cinco aspectos que componen la intimidad.
1. La intimidad física
La causa de una intimidad física deficiente generalmente radica en el desconocimiento por parte del hombre y de la mujer de sus mutuas diferencias. Hombres y mujeres llegamos al momento de unión física por distintos caminos y buscando diferentes objetivos. El énfasis del marido suele estar centrado en los aspectos físicos (mirar, tocar) porque para él la conquista es clave y la cima de la intimidad la vive durante el acto mismo. La mujer, en cambio, centra su atención en aspectos más afectivos (ternura, frases bonitas, seducción) porque para ella sentirse apreciada y tratada con cariño son asuntos fundamentales. La cima de la intimidad la vive después, cuando se siente acogida tras la entrega de si misma que ha hecho. Para cultivar esta área de la intimidad tienes que conocer y responder a estas diferencias.
2. Intimidad intelectual
¿Qué estás pensando?, es una pregunta que con frecuencia se pronuncia durante el pololeo y el noviazgo. Pero después de casados, por no molestar al otro, por dar todo por sabido o por falta de momentos para conversar tranquilos, esta pregunta se deja de formular. Entonces los diálogos comienzan a girar en torno a lo que se “hizo” más que en torno a lo que se piensa. Error: sólo comunicándose los pensamientos más íntimos es que se consigue la intimidad intelectual. No se trata de discutir temas siempre profundos. Lo importante es sacar afuera los pensamientos. Decirle al otro lo que piensas acerca de lo que ocurrió en la oficina, la política, la economía o la crianza de los niños.
3. Intimidad social
Cuando un matrimonio cumple sus bodas de oro y sus hijos y amigos les regalan un diaporama o power point se confirma lo importante que han sido en su vida aquellos momentos compartidos: los almuerzos familiares, las vacaciones, las celebraciones de cumpleaños y aniversarios, los asados con los amigos, los bautizos, primeras comuniones y graduaciones de los hijos… Todos estos “eventos” constituyen una verdadera cadena de hechos con que se va escribiendo la vida y por eso es tan importante cuidarlos y vivirlos como equipo. Cuando se viven con este sentido, enriquecen tu intimidad.
4. Intimidad emocional
Es muy difícil tener una intimidad rica con un marido o mujer que no exterioriza lo que está sintiendo. ¿Tiene rabia y se la traga? ¿Siente pena y lo niega? El disimulo y la negación de los sentimientos frustra al cónyuge pues son actitudes que construyen una fortaleza alrededor del alma del otro. Alguien describió la soledad como “una enredadera que te crece por dentro” y es una metáfora contundente pues la incapacidad para compartir con el cónyuge las emociones termina por hacerlos sentir a ambos muy solos. En este sentido, la intimidad emocional más intensa se consigue al “sentir en carne propia” los sentimientos del otro.
5. Intimidad espiritual
Generalmente es la cara menos vista y analizada de la intimidadconyugal y sin embargo, la que más influye en el “clima” de la relación. No debe confundirse con un estar de acuerdo en todas y cada una de las creencias, ni con pertenecer al mismo movimiento ni asistir a las mismas conferencias. Se refiere a compartir con el otro lo que pensamos acerca de la vida y la muerte, lo material y lo espiritual. Y todo eso, comprenderlo, respetarlo y hacerlo propio. La auténtica intimidad espiritual se refleja en relaciones conyugales donde el acuerdo en aspectos valóricos consigue una vida sin enormes confrontaciones o verdaderos procesos cada vez que hay que tomar una decisión.
Estas son las cinco caras de la intimidad. ¿Que nos impide conocerlas? Como señala, Gary D. Chapman, norteamericano, autor de “Five Signs of a Loving Family” “(Los cinco signos del cariño familiar)”: “Todos somos egocéntricos. Y por eso, cuando nos centramos en nosotros mismos, perdemos intimidad. Lo contrario de eso es, entonces, el amor. El amor se concentra en el bienestar del otro. Nos tomamos tiempo para acompañarlo, escuchar sus pensamientos, sentimientos y deseos. Así nos convertimos en su apoyo y fuente de cariño, lo que ayuda a construir un matrimonio más fuerte ”.
Si te agarra la máquina... ¡chao intimidad!
No es posible tener intimidad sin serenidad. Porque si bien no basta con ver a un matrimonio sentado sobre la arena junto al mar, en silencio y compenetrados en el espectáculo de la puesta de sol para asegurar que tienen una rica intimidad, al menos sí es posible sostener que ellos tienen la disposición a gozar de intimidad. ¿Por qué? Porque la intimidad, como la inspiración de un artista, aparece sólo después que le damos la oportunidad de hacerlo, con largos momentos dedicados exclusivamente a eso: a estar junto al otro, como el artista frente a la tela o la página en blanco. La serenidad es, en este sentido, la cómplice de la intimidad, una cómplice sin la cual es imposible entregarse a sí mismo.
